No tienes cuerpo de bailarina.
Me lo he dicho veinte millones de veces, siempre después de ver a una bailarina de las de verdad; esos preciosos músculos en las piernas vs mi horrenda celulitis (con sus correspondientes músculos debajo, bien escondidos).
Hace muchos años, una persona muy importante en mi vida en un momento muy inoportuno me dijo precisamente eso: ¿Quieres ser bailarina? Pues no tienes cuerpo de bailarina.
Y me hizo mucho daño, tanto que sigo recordándola.
Pero esa no fue la única persona que me dijo algo así. También lo escuché de:
- Los compañeros del cole que me llamaron vaca durante más de 7 años.
- Miembros de mi familia que me señalaban los incipientes michelines como si fueran el fin del mundo y todo mi presente debiese girar en torno a ellos.
- Compañías de danza en las que no he entrado por el cuerpo que tengo (más bien por el que no tengo).
- Alumnas que han pensado de mí que era imposible que yo me moviese de esa manera teniendo ese cuerpo. (Esto NO va por ti, querida Almu).
- Señoras con curiosidad morbosa que se acercan después de una actuación y me dicen que si, que muy bien y tal, pero ¿y esa tripa mía?.
- Compañeras de profesión a las que les ha ido mucho mejor en el sector cuando han adelgazado.
- Compañeras de clase a las que se les iban los ojos a mi barriga.
- Escribe aquí quién, cuándo y como te has sentido no apta para bailar.
Los cuerpos de las bailarinas
Claro que no tengo cuerpo de bailarina, las bailarinas de danza del vientre en occidente son altas, delgadas, de piel tersa y pelo largo. A poder ser, también son jóvenes.
Cuanto arte excluido en estas palabras.
Yo soy joven y tengo el pelo largo (por ahora), pero al resto de características no tengo acceso y nunca lo tendré. ¡Ni falta que hace!
Y esto no es algo que me diga yo sola, me lo dice la sociedad constantemente, los miedos de comunicación, las miradas del público, las preguntas inoportunas.
Nos lo decimos nosotras mismas como un eco interminable de todas esas escuchas repetitivas a lo largo de nuestras vidas.
Y la solución a este problema – porque para mí es un problema – no sólo pasa por todo aquello que nos cuentan de quererse a una misma, aceptarse, valorarse y bla bla bla.
Aceptarse y quererse es muy importante (también difícil de conseguir), pero no podemos negar la parte social y exterior que tiene el amor propio, por muy contradictorio que pueda sonar. ¿Te suena del algo el movimiento body positive?.
Para muchas no es suficiente con ir a terapia y con el trabajo interior, cuando la sociedad en su conjunto y cada una de las personas que te rodean individualmente, no apoyan tu trabajo sólo por no tener un cuerpo normativo.
Y mi trabajo personal es el de gorda que quiere adelgazar, pero las hay flacas, embarazadas, altas, caderonas, sin tetas, escriba aquí su complejo, que tienen en esencia el mismo problema que yo: su cuerpo no es normativo.
Así que hoy hago pública mi decisión de romper una lanza desde mi blog a favor de la diversidad de cuerpos.
Quiero que este proyecto mío -DancePandemic de mi corazón- en todo su conjunto sea un espacio inclusivo, en el que todas las bailarinas se sientan bienvenidas, y arropadas, independientemente de su aspecto físico.
Danza del vientre para adelgazar
Dato tristemente curioso: hace no mucho me di cuenta de que la mayoría de las visitas a mi web venían por un mega artículo que escribí titulado La danza del vientre adelgaza, ¿mito o realidad?.
Ya estoy harta de la inclusión de boquilla, del «todos los cuerpos son aptos para bailar» pero en mí compañía sólo bailan cuerpos modelo. Eso también es exclusión.
Voy a apoyar sin parar a todas las bailarinas de verdad. Voy a predicar con el ejemplo (de hecho, ya lo hago desde hace varios años).
¿Tienes un cuerpo? ¿Tienes un alma?
No lo dudes más, eres bailarina.
¿Tu también te has sentido excluida o con menos oportunidades por tu aspecto?
No eres la única. No estás sola.
Nos encantaría leer tu experiencia en los comentarios. Juntas somos más fuertes.
Que bonito post Zahida!
He visto a muchas mujeres con cuerpos «no normalizados» (más gordas, más flacas, más viejas…) bailar estupendamente, expresar muchísimo más que otras con cuerpos «normalizados».
En la danza en la que yo me muevo (danza con base en la tradición del oeste de África), por tradición, todas bailan, jóvenes, adultas, gordas, flacas… Y como bailan!!!
Diferente es como me consideren a mi por no ser una profe fibrosa, delgada o musculada… Pero al menos tengo la suerte de poder enseñar como estas mujeres con cuerpos «no normalizados» danzan maravillosamente.
Adelante con el proyecto. Es precioso vernos bailar a todas, todas las que queremos bailar!
Precioso Tania!
Muchas gracias por compartir tu experiencia y si, larga vida a todos los cuerpos. TODOS! <3
Gracias por tu post!!
Ha mi me ha pasado, tomaba clases de ballet para adultos como refuerzo para la danza oriental, por mejorar postura corporal, giros y mas cosillas…
La profesora básicamente me llamó gorda en clase delante de todos… y por lo visto a las compañeras les hizo mucha gracia… he de decir que tengo 28 años, y la siguiente mas joven tendría 50 años mínimo (vamos que no eran niñas pequeñas) si ni siquiera los adultos respetan… en fin…
Por supuesto dejé de ir a este sitio y no volveré mas, nadie tendría que pasar por cosas así por no tener el cuerpo ideal.
Gracias Anabel,
Yo creo que es muy peligroso esto de los cuerpos ideales, precisamente porque excluyen a todos los otros cuerpos sin ningún motivo.
Ponen límites, restringen, y dejan fuera del sistema (de cualquier sistema), a muchas personas que tienen mucho que aportar y que contar, y no solo hablo de danza.
Siento mucho lo que te pasó en esa clase de ballet, y me alegra tu decisión. Seguro que encontrarás una mucho mejor e inclusiva.
Abrazos!
Zahida
hay mucha belleza y verdad en tus palabras. son abrigo para mi, te agradezco infinitamente. me encanta bailar!!! lo hubiese hecho de manera profesional pero me senti vieja a los 23 hoy tengo 45 y siempre vuelvo a aprender alguna tecnica nueva. en esta etapa de mi vida elegi la danza arabe (aqui le llamamos asi) porque quiero ser dueña de mi cuerpo y disfrutarlo…ya va siendo tiempo. Soy muy bajita, mido 1,50 metros…
feliz de haberte encontrado
Hola Soledad,
Muchas gracias por tu comentario.
Justo esta mañana reflexionaba sobre que nos ofrece la danza oriental y porqué tantas y tantas mujeres (y no sólo dentro de la danza oriental), buscan constantemente mostrarse atractivas, guapas, apetecibles… Siempre juzgándonos por la mirada ajena.
Internamente he llegado a la conclusión de que ese no es mi lugar (y nunca lo ha sido), y me gustaría que como tu, todo el mundo bailase para celebrar su cuerpo y su vida, independientemente de si eso es aceptado o no por los estándares de belleza/edad/capacidad de turno.
¡¡Te mando un abrazo grande y mucha danza!!
Zahida.